Ezequiel Fernández MooresPARA LA NACION
Es el 1° de setiembre de 1945 y Vito Dumas inicia el tercer y penúltimo de sus cuatro grandes viajes. El navegante solitario parte con el Legh II de Buenos Aires a Nueva York. La llegada se complica. Primero, "un avión de combate", escribe Dumas, "deja caer un voluminoso objeto" que podría haberlo enviado "al fondo del mar". Dumas, acaso exagerando, creyó siempre que "fue un acto intencionado" de Estados Unidos "para amedrentarlo", porque el Legh II llevaba bandera argentina y un día antes, 4 de junio de 1946, había asumido como presidente Juan Domingo Perón. Y luego un remolcador "ignora por completo" su pedido de auxilio. Dumas lleva treinta horas sin dormir. Decide lanzarse otra vez al mar abierto.
Son dos mil millas por el Atlántico Norte hacia las islas Azores, sin carta náutica ni comida suficiente...https://www.lanacion.com.ar/deportes/la-leyenda-vito-dumas-navegar-es-preciso-nid2279320